Sabes algo, ningún atleta puede conseguir una oportunidad de competir en los Juegos Olímpicos a menos que ya estén en la cima o en nivel de excelencia en la rama de la especialidad del deporte que eligió.
Muchas veces las diferencias en sus Capacidades, Físicos y Talentos son casi insignificantes porque sus cuerpos están tan cerca de la cima absoluta del acondicionamiento físico. Muchas veces los mejores corredores los puedes ver obtener la victoria por milésimas de segundos en vista que todos los que concursan se están acercando al mismo estándar de condición física. Casi todos ellos están en edades adecuadas para esa competencia, se entrenan casi a la perfección, hacen lo correcto y de la mejor forma y siguen las reglas y normas del juego.
Cada uno de los Atletas que compiten tienen posibilidades razonables de llevarse a casa la presea de Oro, pero entonces ¿Qué es lo que dicta quien será el primero, segundo o tercero? Cualquier entrenador de atletismo o veterano olímpico te dirá la respuesta: El Ganador se lleva a casa el oro debido a su Espíritu y no a su cuerpo.
El ganador muchas veces es aquel que simplemente fue capaz de exigir mas de su cuerpo que cualquier otro. Todos tienen en general un cuerpo apropiado en este nivel de competencia. Pero el Ganador tiene el Cuerpo y el Espíritu correcto y es el Espíritu el que hace que extraiga solo un poco más de su cuerpo. y esto es lo que hace la diferencia y esto es lo mismo en los negocios.
Lo creas o no puedes entrenar tu vida y estudiar y obtener un MBA y lo puedes hacer en las mejores en las mejores Universidades o Escuela de Negocios del mundo; Puedes ser entrenado y hacer modelos de negocios de lujo, es más puedes hacer un seminario de entrenamiento en una de las compañias de las clasificadas por Fortune 500. Esto perfeccionará tus Habilidades, Conocimientos Empresariales y aumentarán tus posibilidades de Éxito. Pero sabes, para poder ingresar a las altas esferas de tu Industria (lo creas o no) deberás de trabajar con atención en tu Espíritu, el cual la mayoría pasan por alto. Tienes que desarrollar el Espíritu Empresarial correcto.
Parte de esto significará tener la perspectiva de los recursos, el dinero y poder no como un producto de la codicia y avaricia sino más bien como un producto de la Creación y Sumisión.
Para hacer de esto algo sostenible debes de entender el dinero al 100%. Entonces ¿Qué es el dinero? Físicamente el dinero es un marcador económico de la riqueza que facilita las transacciones comerciales; Pero, en lo espiritual ¿Qué significa?
Te daré la respuesta en mi próximo artículo de mi blog 🙂
Escribe en los comentarios como estás desarrollando tu espíritu empresarial correcto.
Un abrazo,
Amilcar Kraudy
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