Cuando organizaciones, países y empresas pierden de vista quienes los van a suceder o relevar su liderazgo se vuelve irrelevante. El valor duradero de un líder se mide por su sucesión. Las compañías que pierden un CEO, presidente o líder con frecuencia caen en la confusión. Es un excelente tiempo para enfocarnos en el legado a una nueva generación. Fortalecer tu empresa, organización o nación y preparar un sucesor para que siga tus pasos son dos elementos claves en todo liderazgo. Hoy en día pocos jefes ejecutivos de empresas y organizaciones capacitan a líderes fuertes y los preparan para asumir el mando en la organización.
Y en todo esto la reputación es y será clave. Tarde o temprano el líder que hace trampa, es deshonesto, pierde el enfoque o la visión y es antipático, lo más seguro es que se quedará sin gente a la cual liderar.
Probablemente hoy te puedes dar cuenta que liderar no solo requerirá nueva información, también nuevas maneras, métodos y formas para responder a las situaciones y decisiones importantes y en especial a las urgentes. He aprendido mucho de mis mentores, aun de mis colegas y amigos, pero también he aprendido mucho más de mis estudiantes o mis colaboradores cercanos y equipo de trabajo.
Sabes algo, debes preparte para esa nueva estación. Como lo dije antes: Liderazgo siempre será la solución.
Tu amigo y mentor,
Amilcar Kraudy
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